Sierra Bermeja es una zona de ganado de monte, cabras y ovejas sobre todo, y muchas han muerto pasto de las llamas, como han comprobado los servicios de extinción de incendios que han encontrado decenas de animales carbonizados, según ha explicado a Efe Francisco Morales, bombero forestal.

La que más ha sufrido, sin duda, es la fauna salvaje -conejos, ciervos, corzos, jabalíes-, asegura este bombero oriundo de Pujerra, uno de los municipios malagueños desalojados este domingo a causa del incendio.

Los jabalíes chillaban en los zarzales

“Se te ponía la piel de gallina al escuchar a los jabalíes chillar entre los zarzales ardiendo en el monte porque se estaban quemando”, señala Francisco, visiblemente afectado.

Sus vecinos describen a Francisco como un enamorado del campo y los animales, que desde que el miércoles comenzó el incendio “se ha dejado la piel” -aseguran quienes lo conocen- para luchar contra un incendio devastador que ha puesto en jaque a seis pueblos del Valle del Genal.

Resulta muy difícil describir lo que se siente al ver cómo “el fuego devora lo que has estado cuidando y vigilando todos los días durante años”, comentaba a Efe con voz entrecortada este bombero de la serranía.

Impotencia y pena al ver arder el monte

“Impotencia” y “pena” son los sentimientos que reflejan su sentir después de pasar cinco jornadas luchando para controlar un incendio en el que ha perdido la vida uno de sus compañeros y se han quemado casi 10.000 hectáreas de monte.

Para Francisco, que conoce bien una sierra, o ha sido "una terrible coincidencia" o el responsable de esta tragedia “lo tenía muy bien estudiado para generar un incendio de estas magnitudes” al prender el fuego “en el momento justo y en los puntos justos”.

Otro de los momentos más tensos en su brigada se han vivido cuando varios de sus compañeros han visto “con sus propios ojos” como la candela quemaba sus fincas sin poder hacer nada “y aún así, como profesionales, han tenido que seguir luchando contra el bicho” que ha devorado una gran parte de Sierra Bermeja.

"Lo peor está por venir"

Para este bombero forestal, “lo peor está por venir” y a quienes viven y trabajan en las zonas arrasadas por el fuego aún les quedan “momentos complicados que pasar”.

En breve habrá que regresar al día a día del monte y ahí se darán cuenta, de verdad, "de lo que ha pasado”, asegura, y la pena llegará para quedarse durante un tiempo cuando comprueben que aquellos pinares donde se resguardaban del calor en verano o aquel saliente donde se comían el bocadillo, ya no están.

Asimismo, coincide con otros lugareños en que la sierra no volverá a ser igual, aunque se regenere, porque las condiciones meteorológicas actuales no son las mismas, concluye.