Tras la victoria aplastante del PP de Germán Beardo en las elecciones municipales del 28M obteniendo mayoría absoluta, parece que las aguas en la Jefatura de la Policía Local volverán por fin a la calma, el respeto y el civismo.
La guerra mediática entre el defenestrado sindicato policial UPLBA (por culpa de sus representantes legales, con Juan José Cobos al frente, y de la mano del PSOE) y el alcalde Germán Beardo, ha acabado con el sindicato sacando bandera blanca y convocando una asamblea extraordinaria para el miércoles 7 de junio, a las 17.30 horas, en el Centro Cívico.
Entre los asuntos a tratar se debatirá el ruinoso estado actual del sindicato tras ser prácticamente destrozado por Juan José Cobos y José Luis Guerrero -el del "dolor de espalda"-, entre otros personajes sin escrúpulos ni profesionalidad alguna, que como representantes sindicales no han sabido en ningún momento negociar cívicamente con el Ayuntamiento las necesarias mejoras laborales que necesita la Policía Local.
Igualmente, se pondrá sobre la mesa la dimisión inmediata del núcleo duro del sindicato -sus polémicos representantes- para dar paso (si se atreve alguien) a un nuevo equipo de trabajo que recupere la cordura en el sindicato y pueda sentarse a negociar con el alcalde sin caer en prácticas de dudosa ética moral, y más propias de sindicatos cuasi que mafiosos.
Y es que, sin duda, la estrategia de acoso y derribo contra el alcalde llevada a cabo por Juan José Cobos y cia durante estos últimos años no ha sido nada inteligente a la hora de conseguir las mejoras laborales. Habiendo fracasado absolutamente, por tanto, como representante sindical.
Tal fue el extremo y la desesperación total de la UPLBA por tumbar al alcalde (no todos, sino de una docena de agentes, el núcleo duro), y las líneas rojas cruzadas, que hasta el propio Germán Beardo denunció varios escraches sufridos por su familia e hijos menores por parte de estos agentes que día a día se dedicaban a buscar el enfrentamiento y la crispación, tanto en la calle como en todos los plenos a los que acudían como matones y hooligans de pacotilla, gritando e insultando cual barra de bar.
Llegó a tal punto el asunto que hasta tuvo que ser sacado en volandas de un pleno municipal uno de estos líderes sindicalistas por un supuesto dolor de espalda tras ser expulsado por sus continuas interrupciones a gritos, mientras que desde el PSOE, con su aún portavoz Ángel M. González, aplaudían encantados el espectáculo. [El juzgado deja retratada la falsa trama orquestada por PSOE y UPLBA: ni detención ni cocaína]
“Presiones y coacciones” a otros compañeros policías
Hay que recordar que este sindicado UPLBA se hizo tristemente conocido en la ciudad tras protagonizar un grupo de policías locales una presunta huelga encubierta durante varios meses en 2021 utilizando como supuesta excusa para hacer presión haber "perdido" los pantalones reglamentarios, al mismo tiempo que reclamaban al alcalde 3.000 euros al año para cada agente y la reducción de jornadas y horas de trabajo, según destapó el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España, en El Puerto.
Igualmente, el sindicato UPLBA reclama mejoras en las instalaciones de la Jefatura y que se repongan las plazas de agentes que se han ido jubilando, entre otras mejoras. Si bien, algunas de sus reclamaciones son consideradas "necesarias y justas" por el resto de los policías locales no adscritos a este sindicato, lo que condenan son las formas en las que han estado actuando los representantes de la UPLBA y sus métodos para lograr sus pretensiones. De ahí que muchos policías locales no hayan participado en la campaña de protesta de la UPLBA y nunca haya habido unidad entre los propios agentes en la Jefatura.
De hecho, tal ha sido la tensión habitual en la Jefatura que se han dado denuncias de varios agentes a otros de la UPLBA, por asegurar estar sufriendo "coacciones y mobbing", e incluso siendo "insultados y amenazados", teniendo que acudir en alguna ocasión la Policía Nacional a poner orden en la propia Jefatura.
Sin ir más lejos, hace unas semanas se conoció la condena de un conocido sindicalista de la UPLBA, agente de la policía local, por un delito de amenazas a un compañero policía local de otro sindicato, al que presuntamente trató de atropellar a la salida de la Jefatura en El Puerto.
Por suerte para los portuenses, el futuro de la UPLBA parece que se decidirá el 7 de junio en asamblea, con dos opciones: la desaparición del sindicato o la creación de un nuevo equipo de trabajo y representantes con dos dedos de frente, dejando ya a un lado la falta de inteligencia y pocas luces para negociar de Juan José Cobos y sus pandilleros. Aunque nunca se puede descartar que no haya ningún agente con el valor y la responsabilidad suficiente para dar un paso al frente, y se mantenga a Juan José Cobos y cia como representantes teniendo al sindicato otro cuatro años hundido en la miseria.