El corazón de la Bahía será el primer fin de semana de julio, siempre que el viento sea benévolo y lo permita, testigo directo de un espectáculo increíble a todos los niveles, llenando el cielo portuense de globos aerostáticos que sobrevolarán navegandodistintos lugares del término municipal en una competición con arraigo y solera que se celebra por primera en la historia en El Puerto de Santa María.
Se trata de la XXXVIII edición del Campeonato de España de Aerostación organizada por la Real Federación Aeronáutica Española a través del club deportivo Globotur, que se ha encargado de su coordinación en los tres últimos años.
El alcalde de El Puerto, Germán Beardo, señala que El Puerto será epicentro de una prueba oficial nacional de primer orden, dentro del deporte aerostático en España, que además es puntuable para el campeonato mundial y el europeo, situándose, así como escaparate de una de las más importantes competiciones de esta disciplina.
Con esta iniciativa, además, destaca el primer edil, contribuiremos desde El Puerto a promocionar el cielo de nuestra tierra como activo turístico, poniendo en valor la gran oferta del sur del Sur, no sólo a nivel nacional sino también internacional, dentro de nuestra categoría como destino de excelencia.
El primer edil de la ciudad, acompañado del teniente de alcalde de Medio Ambiente, Millán Alegre, ha ultimado con el CEO y Fundador Javier Benítez los detalles para su celebración, condicionada siempre al viento que será el factor que determine los horarios y salidas.
La competición, en la que participarán 15 globos provenientes de distintos clubes de España, consiste en una serie de dianas físicas y digitales que se colocan en el campo y los participantes tendrán que llegar volando a dichos puntos y lanzar un testigo. Cabe destacar que se premia la precisión en el vuelo, más que la distancia recorrida o llegar primero a la meta. Los puntos exactos de despegues y aterrizajes de las pruebas no se conocerán hasta el mismo día de la celebración, dependiendo de la dirección del viento que haya en ese momento. Por tanto, el único enemigo de esta competición es el viento, que cuando supera los 20 kilómetros horas impediría su salida.