EL PUERTO.- El pasado jueves 6 de agosto la plaza de toros de El Puerto de Santa María acogió una corrida de toros para celebrar el 140 aniversario de la construcción del coso portuense. Finalmente, la corrida quedó en segundo plano tras la enorme polémica generada con los vídeos y fotografías que dejaban ver un aforo que podría superar las 5.300 entradas que el Ayuntamiento y el empresario aseguraron vender, en un aforo reducido al 50% para una plaza de unas 12.000 localidades.
Además, en las imágenes también se podían apreciar presuntas irregularidades respecto al incumplimiento con las medidas preventivas por la Covid-19, como la falta de distancia social entre asientos.
Ante lo sucedido, y con la Junta de Andalucía investigando lo sucedido y anunciando nuevas medidas para los eventos taurinos, se suma ahora un expediente sancionador de la Asociación Nacional de Organizadores de Espectáculos Taurinos (Anoet). Según la asociación las instantáneas han causado "un importante daño a la propia imagen de la fiesta".
"Las repercusiones del mismo, también han perjudicado a las aficiones de otras poblaciones, así como a los toreros, ganaderos y empresarios, al provocar que las administraciones, tomen medidas más restrictivas, haciendo inviables otros espectáculos programados", han lamentado. El propio Ayuntamiento de El Puerto decidió cancelar los eventos taurinos restantes de la temporada, según anunció el concejal de Plaza de Toros, Álvaro González, días después de la polémica.
Así, Anoet ha abierto un expediente sancionador a la compañía Lances de Futuro, del empresario José María Garzón, organizadora del festejo. El proceso ahora está a expensas de escuchar las alegaciones de los responsables involucrados.
Por su parte, el empresario de la plaza, José Montes, ha defendido nuevamente, a través de un comunicado enviado a los medios, que en todo momento que el 6 de agosto se vendieron 5.300 entradas. El tendido tiene un aforo de 12.000 personas, con lo que se habría cubierto menos de la mitad de la plaza. Además, ha aportado un certificado como prueba de la venta de entradas en la taquilla.
