EL PUERTO.- Ecologistas en Acción anuncia que emprenderá todas las acciones legales para impedir que se construya una urbanización en el Rancho Linares, uno de los bosques de mayor biodiversidad y valor ecológico de la Bahía de Cádiz.
Según explican, a través de un comunicado, “El Ayuntamiento de El Puerto está acelerando los trámites para que se inicie lo antes posible la urbanización de este espléndido bosque mediterráneo, habiendo aprobado recientemente su proyecto de urbanización”.
Este proyecto urbanístico está promovido por el Grupo Q, la misma empresa que según denuncia Ecologistas en Acción “ha vertido en una parcela de este bosque cientos de toneladas de escombros procedentes de la demolición parcial de la Residencia de Tiempo Libre de Cádiz”.
Recuerdan los ecologistas que Rancho Linares es “un magnífico bosque con una superficie de 25 hectáreas, en el que existe una variada gama de ecosistemas de alto valor ecológico, como pinares, retamares, acebuchales y pastizales, y una rica biodiversidad, habiéndose inventariado más de 200 especies de plantas, algunas catalogadas y protegidas. Además, da cobijo a un gran número de especies de aves y a una población de camaleones (Chamaeleo chamaeleon L.), especie protegida por la ley”.
También recuerdan los ecologistas que “tiene un importante elemento del Patrimonio Histórico: el acueducto de la Piedad, obra realizada en el s. XVIII para conducir el agua desde los manantiales de La Piedad hasta El Puerto de Santa María. En la zona que se pretende construir, es bien visible una de las lumbreras”.
"Modificación fraudulenta del anterior PGOU"
Por otro lado, aseguran desde Ecologistas en Acción que “este proyecto urbanístico se inició con una modificación fraudulenta del anterior PGOU aprobada en 2011, siendo alcalde Enrique Moresco”. Y añaden: “Esta urbanización no se ha sometido la preceptiva Evaluación Ambiental Estratégica (EAE); la misma razón por la que se ha anulado el PGOU del municipio”. Recordando que “este trámite obliga a justificar la necesidad de la construcción de las 1.260 viviendas, analizar alternativas a su ubicación y evaluar su impacto sobre los recursos naturales y el patrimonio cultural, prestando especial atención al patrimonio natural, áreas sensibles, calidad atmosférica, de las aguas, del suelo y de la biota, así como al consumo de recursos naturales (necesidades de agua, energía, suelo...) y al modelo de movilidad/accesibilidad funcional”.
Lamentan así los ecologistas que “nada de esto se ha hecho. Esta urbanización está alejada del casco urbano, con lo que se promociona un urbanismo expansivo y deslavazado”.
Además, y siempre según el comunicado, “el proyecto inicial incluía la urbanización prácticamente total de este bosque. Posteriormente, debido a las alegaciones, denuncias y movilizaciones fomentadas por Ecologistas en Acción, el PGOU aprobado en 2012 redujo la urbanización a la mitad de la zona, preservándose la mayor parte del pinar y retamar colindante con la travesía de la antigua N-IV. La otra mitad, que conforma un magnífico bosque de acebuches, quedaría totalmente destruida con la urbanización”.
Ecologistas en Acción organizó en la tarde de este miércoles un recorrido por este bosque, cumpliendo con todas las medidas de seguridad a la que obliga la pandemia del coronavirus, para dar a conocer las bondades de este bosque.
Finalmente, concluyen, “no es admisible que tras la fuerte deforestación que ha sufrido El Puerto de Santa María en las dos últimas décadas, cifrada en más de dos millones de metros cuadrados de terrenos forestales, se pretenda de nuevo urbanizar uno de los mejores bosques autóctonos que quedan en el municipio”.