La Federación Local de Asociaciones Vecinales, “Sol y Mar”, está recibiendo las quejas, críticas y el pesar de la ciudadanía, con respecto a la actual situación que se está viviendo en El Puerto de Santa María, por lo que considera una falta de gestión del equipo de gobierno encabezado por Germán Beardo, que según la Flave “está abocando a la ciudad a convertirse en un territorio donde parece que cada cual hace lo que quiere, convirtiéndose en una ciudad sin ley.

Ante la falta de la Policía Local, está siendo la Policía Nacional la que salve la papeleta

Recuerdan que “estamos en la época estival, donde se duplica e incluso triplica la población en la ciudad, gracias al turismo que ésta recibe, pero en este año, nos encontramos con una lamentable situación de inseguridad, (y no es solo una sensación de la ciudadanía), ante la ausencia de efectivos de la policía local en las calles, plazas, playas y vías de la ciudad”.

Según la Flave, “se ha llegado este verano, colma la paciencia de la ciudadanía, que denuncia en sus barrios: carreras ilegales con vehículos a gran velocidad, estacionamientos indebidos, celebraciones de botellones, masificación de locales, sonidos descontrolados en el ocio nocturno, ocupación excesiva del espacio público y  creación de numerosas terrazas, limitación de la accesibilidad y movilidad del ciudadano, etc.”.



Todas las cuestiones relativas a la seguridad están siendo, en gran medida, solucionadas gracias a la intervención de la Policía Nacional,  que es quien está acudiendo a las llamadas de la ciudadanía, quien mantiene el orden y proporciona seguridad a los vecinos.

Además, añaden que “al estar en verano, ser una ciudad de costa y turística, otra de las preocupaciones de la ciudadanía se centra en la seguridad de los 16 km de playas que tiene, y que a día de hoy se encuentran atendidos, por falta de previsión, con un contrato menor de servicio de socorrismo que no es acorde a las necesidades que presentan”.

En definitiva, para la Flave “la ciudadanía está cansada de escuchar que hay un problema tras otro y que el máximo mandatario, Beardo, y su equipo de gobierno, es incapaz de solucionarlos. Es el encargado de  poner a funcionar ya los servicios de la ciudad, y actuar cuando la ciudadanía le demanda que defienda sus intereses, pues se siente desatendida y desprotegida”, concluyen.