La guerra interna en la Jefatura de la Policía Local de El Puerto continúa generando polémicas y nuevos capítulos esperpénticos que acaban en los juzgados. En esta ocasión, según ha podido conocer El Puerto Actualidad, un agente de la Policía Local ha interpuesto una denuncia en el Juzgado nº2 de El Puerto por un presunto intento de atropello por parte de un compañero.
Los hechos ocurrieron el pasado 4 de noviembre cuando el agente salía de trabajar de la Jefatura, cuando presuntamente un agente de la Policía Local, perteneciente al núcleo duro de la UPLBA, trató de atropellarlo.
El agente que pertenece a otro sindicato que no comulga con las actuaciones del otro grupo de agentes de la UPLBA, pudo evitar el presunto intento de atropello e interpuso denuncia en el Juzgado, que en este caso es el nº2 que es el que se encontraba de guardia.
Hay que poner en contexto lo que está ocurriendo desde hace meses en la Jefatura de la Policía Local donde hay dos claros bandos de agentes. Por un lado, están los que pertenecen a la UPLBA o los conocidos como "sin pantalones", que están llevando a cabo polémicas acciones como fue la conocida “huelga de pantalones”; como una presunta huelga encubierta para presionar al Ayuntamiento en busca de una fallida mejora salarial de 3.000 euros más al año por cada agente. Y por otro lado, existe otro grupo de agentes que, a pesar de las presiones que han denunciado que sufren, no siguieron la "huelga de pantalones" ni siguen las acciones del sindicato UPLBA por no estar conforme con su forma de actuar, por considerar que esas no son las formas de negociar nada.
De esta manera, la tensión diaria en la Jefatura va en aumento, mientras que el mismo entorno de la UPLBA filtra desinformación en las redes sociales y a través de medios afines tratando de generar conflicto y seguir presionando al alcalde Germán Beardo, con quien tienen una auténtica cruzada organizada... al igual que la tuvieron antes -y la tendrán- con otros alcaldes y concejales de Policía Local que sí acabaron cediendo a unas prácticas que algunos tachan casi de "mafiosas".
Incluso, propios compañeros policías locales han llegado a denunciar presuntas coacciones y amenazas, y hasta sabotajes, robos y destrucción de material personal, por parte de agentes de la UPLBA por no seguir la línea marcada por el sindicato, tratando presuntamente de amedrentar a todo aquel que no les siga el juego. De hecho, hay mucho miedo en la Jefatura, con discusiones habituales y pánico a persecuciones personales… habiendo tenido incluso que acudir en alguna ocasión la Policía Nacional a poner orden. [Policías locales que no secundan la presunta huelga de pantalones denuncian coacciones y mobbing]
Sea como fuere, y a la espera de que se resuelva judicialmente el supuesto caso de intento de atropello, se suma un nuevo capítulo a la guerra interna que al ritmo que va puede acabar cualquier día en una auténtica desgracia.