La segunda ola, aun mayor que la primera, pareciendo mas la primera que la segunda, y aun siendo después de la primera, trae ejemplos de claridad básica en la normativa a aplicar.

La falta de dirección, el remolino institucional provocado por un gobierno, diecisiete autonomías y dos ciudades autónomas, nos llevan a la más absoluta dispersión, confusión y caos. Y ello se puede centrar en el tema de los allegados, situación ya clara al día de hoy, pero no así el número de comensales y núcleos familiares.

Tomando al pie de la letra la interpretación, debemos quedarnos con cenas de no más de dos núcleos familiares y sin que superen los diez. Eso provoca sorteos familiares, pues quien tenga más de un hijo casado parece que no podrá sentarlo a la mesa, serian tres núcleos familiares.



Leyendo la norma la Junta dice que las reuniones no podrán ser de más de diez personas… salvo que sean convivientes, por lo que si en una casa viven más de diez personas no tendrán que expulsar a nadie como si de un nominado se tratase, y que no sean de más de dos núcleos familiares, por lo que ya no serían convivientes, los diez o los dos… lo peor viene si uno se trata de leer el oportuno BOJA, en donde la limitación del artículo 6 apartado primero se remite al apartado 2, dejando claro que todo lo dicho depende del cumplimiento de la recomendación, no obligatoria, que limita los parámetros de uso público aun siendo propiedad privada, inviolable, pero a condición de lo que determine el artículo 8 que deja en manos del consejero el limitar o ampliar los parámetros que ya han quedado claros.

De todo ello, el sentido común me lleva a pensar que lo mejor es tener precaución, evitar grandes grupos, cenar en la intimidad, respetar a quien vea un peligro o lo intuya, y sobre todo encomendarse para que nadie, absolutamente nadie se contagie o tema contagiarse… al fin y al cabo son las fiestas de Navidad, y lo mejor es que el brindis de final de año de salud y prosperidad este año tenga un verdadero sentido, aunque tengamos que brindar con una fría pantalla que calentaremos con nuestros corazones. FELICES Y SANAS FIESTAS A TODOS.