Francisco Figuereo Noriega.

Francisco Figuereo Noriega (Tribuna libre).- Y es que por muchas vueltas que le demos, estas fiestas patronales, podrán ser de todo, pero desde luego no son ni nuevas ni normales.

Será que mi manera de pensar es siempre positiva, será que siento como me arropa el manto de mi Patrona cuando llega septiembre, pero lejos de sentirme con miedo, estoy viviendo unas fiestas más introspectivas, sin renunciar a mis ratos con Ella. [El Puerto celebra la Festividad de la Virgen de los Milagros marcada por el coronavirus]

Que el verano se termina, que la noche se hace más temprana y la mañana más fresca. Que la golondrina vuelve a beber en el Guadalete, que los niños miran de reojo su mochila, se marchan los forasteros y toca reiniciar el calendario portuense anual. Ese calendario que cada año comienza con la alcaldesa perpetua bendiciendo nuestras calles, y este año lo hará desde su casa, y por si alguien se despista se ha ataviado con su saya “de Las Conchas” y su manto “de Los Castillos y Los Leones”, para que nadie pierda su norte.



He descubierto estampas nuevas dentro de la propia Basílica, y eso que me he quedado mirando mil veces cada una de sus bóvedas.

He descubierto veintiuna maneras nuevas de ver a la Morenita. Desde Valencia a Cádiz y desde Sevilla a Almería, han plasmado este año a nuestra Virgen de los Milagros.

He descubierto que los portuenses siguen con sus tradiciones, y pueden llenar de nardos un baldaquino que, excepcionalmente, hace de andas de la excelsa patrona.

Eucaristía a cargo del obispo José Mazuelos este 8 de septiembre en la Basílica Menor. / P.P.M.

Es nuestro día grande, nada nuevo para un ocho de septiembre, hoy tu Pueblo no te esperará por sus calles, hoy sin ser normal, con precaución, orden y respeto, tu pueblo irá a tu encuentro. Como un rosario de cuentas grandes y pequeñas, así enfilan nuestros abuelos y nietos la espera para la ofrenda floral. Nardos para la Virgen, que nunca te falte tu perfume, abanicos al aire para aliviar el rezo y desplegar tu aroma, una oración sencilla para que veles por la salud de todos.

Ánimo paisanos, la celebración está en cada uno de nosotros, lejos de malas noticias y temores, tenemos que adaptarnos a lo que requiere cada tiempo. Recordaremos de forma confusa el año que la Virgen de los Milagros no desplegó su manto en su andar hacia el Castillo, pero jamás recordaremos un año que se sintiera sola. No si depende de nosotros, no si depende de mi generación y sus mayores. Tu Puerto siempre te arropará.