La huelga médica nacional convocada entre el 9 y el 12 de diciembre tuvo seguimiento en todos los centros de salud de El Puerto de Santa María, donde numerosos profesionales se sumaron a la jornada reivindicativa. La incidencia, sin embargo, no se trasladó al Hospital, donde la actividad se desarrolló con normalidad al mantenerse los servicios mínimos reforzados.

El paro continúa adelante después de que la Asociación de Médicos Unidos por sus Derechos (MUD) respondiera al documento difundido por el Ministerio de Sanidad. La entidad insiste en que la movilización no obedece a intereses corporativos, sino a la necesidad de frenar el deterioro del Sistema Nacional de Salud, apuntando a jornadas que califican de ilegales, guardias sin reconocimiento adecuado y una sobrecarga que “pone en riesgo la seguridad del paciente”.



En su análisis del borrador del Estatuto Marco, MUD advierte que las guardias siguen tratándose como tiempo “complementario” y no como trabajo extraordinario, lo que implica peor retribución, ausencia de cotización para carrera profesional y ningún avance jurídico. El colectivo denuncia que este modelo, vigente desde hace décadas, es incompatible con la normativa europea.

Otro punto central es la jornada real, que según la asociación puede alcanzar hasta 90 horas semanales por la puerta abierta de las llamadas “necesidades del servicio”. Para MUD, el Ministerio no ha introducido garantías efectivas que impidan estos excesos, funcionando el Estatuto como un “parche estructural” para tapar la falta de personal.

La entidad también critica los servicios mínimos, que tacha de abusivos por exigir coberturas de entre el 50% y el 100%, lo que en su opinión convierte la huelga en un gesto simbólico sin capacidad de presión real.

Sobre la competencia estatal, MUD recuerda que la Constitución permite al Estado fijar las bases del régimen estatutario, por lo que considera viable reconocer la especificidad del trabajo médico con un grupo profesional A1+ y un Estatuto Médico propio que unifique criterios y responsabilidades en todo el país.

La asociación concluye que mantener guardias de 24 horas para sostener un sistema falto de personal funciona como un “parche barato” que compromete tanto a pacientes como a profesionales. “Hasta aquí. No vamos a sostener el sistema a costa de nuestra salud y de la seguridad de los pacientes”, señala el colectivo.