"Novedad salchicha Mauri Ibérico. Toma (Javier Bello), para que te quites la tensión sexual no resuelta". Libres LGBTI de El Puerto de Santa María ha denunciado este ataque homófobo realizado por el concejal de Vox El Puerto, Mauricio Mauri, al concejal del PP y portavoz del gobierno local, Javier Bello.
A través de sus redes sociales, Mauri publicó ayer una fotografía y mensaje haciendo alusión a la orientación sexual del concejal popular, e incluso etiquetándolo para llamar su atención.
Desde Libres LGBTI aseguran que "repudiamos esos tipos de comportamientos y más viniendo de la mano de personas públicas que deben de luchar por la tolerancia y el respeto en lugar de sembrar odio por ideología raza o condición sexual siendo este tipo de actos un ataque contra la libertad de las personas”.
Recuerdan, además, que este tipo de actuaciones impropias de un cargo público, pueden ser consideradas como delitos de odio, y deben ser denunciadas en el número de teléfono habilitado para estas situaciones, el 028.
Suma y sigue
De esta manera, y tras la marcha de Juan Carlos Sanz y Leocadia Benavente, Vox El Puerto en manos -por el momento- de Fito Carreto, José Antonio Gomila y Mauricio Mauri, sigue dando muestras de sus malas formas y de no estar a la altura de lo que se espera de un representante público.
En concreto, el concejal de Vox que más está dando de que hablar -incluso siendo cada vez más repudiado entre los suyos- por su altanería infantil y falta de educación es Mauricio Mauri, que ya ha dejado vergonzosos momentos en el pleno del Ayuntamiento de El Puerto, movido seguramente por su frustración de verse relegado a la oposición.
De hecho, es tónica habitual verle durante los plenos faltando al respeto a otros concejales con comentarios fuera de tono. Y es que, Mauri parece ser un personaje sacado de otros tiempos pasados del blanco y negro en los que seguramente le hubiera gustado vivir. Aunque algo sí parece seguro, Mauri más que una "Salchicha ibérica" como él mismo parece definirse jocosamente, es todo un "gañán ibérico".
De esta manera, se le recuerda al bravucón de Mauri por varios momentos ridículos promovidos por su chulería más propia de otros ilustres y antiguos oficios. Como el vivido en el pasado pleno ordinario de enero, en el que demostró que ni siquiera se había molestado en leer el reglamento interno del pleno municipal.
Aquel día, además de avergonzar a sus propios compañeros de bancada, y ser el hazmerreír del resto, Mauri llegó incluso a no poder votar en un punto del orden del día al haberse salido del salón de plenos en uno de sus "arrebatos" de barra de bar. Quedó así retratado, y demostró que no está capacitado políticamente para más allá de darle un par de clases de pádel a su amado líder Santiago Abascal, en su tiempo libre.
Y es que, está claro, Mauri más que preocuparse por "resolver" supuestas tensiones sexuales de otros compañeros, lo que debe hacer es dimitir de una vez y dejar de hacer el ridículo cada vez que abre a boca. [Los "ofendiditos" de Vox El Puerto: Mauricio Mauri y como hacer el ridículo en un pleno]