Por tanto, y como era de esperar, la zona de las atracciones se llenó de niños y adolescentes, que aprovecharon y exprimieron el presupuesto para este jueves de Feria, montándose en repetidas veces en sus atracciones favoritas.
Los más demandados siguen siendo las distintas montañas rusas, los coches de choque y el tan ansiado Mr Bean. Así, las colas en algunos cacharritos se han prolongado incluso de quince a treinta minutos, a pesar de que los viajes en este día son más cortos que en otras jornadas.
Además, es una odisea intentar llegar de un punto a otro de la zona de atracciones, puesto que las distintas calles estuvieron repletas de familias con niños más pequeños o grupos de adolescentes, ávidos por alcanzar sus cacharritos favoritos.
Cabe recordar que esta jornada también se cumplió con el Día sin ruido, presente en la zona de atracciones de 18.00 a 21.00 horas, más o menos, para intentar dar salida a la petición reflejada por la asociación de autismo Santa María. Y sinceramente, fueron horas de descanso para los oídos tanto de mayores como de niños que se llevan horas en este espacio.