El Puerto celebró el Día Internacional de las Mujeres Rurales, que se conmemora este sábado, 15 de octubre, con la lectura del manifiesto, acto que tuvo lugar el viernes en la Plaza de Toros a cargo de Yolanda Sanz, directora-Gerente del GDR Campiña de Jerez y Costa Noroeste de Cádiz, y Mercedes Santamaría, tesorera de la AAVV “El Castillo”, la entrega de diplomas del curso de técnico de animación, recientemente finalizado, y la confección de varios murales a cargo de alumnos del CEIP Cristóbal Colón.

El evento tenía previsto que hasta 100 personas subieran en un globo aerostático en vuelo cautivo, desplegando los murales, pero las condiciones eólicas impidieron su inflado. El vuelo tendrá lugar en el Poblado de Doña Blanca en una nueva fecha que se anunciará oportunamente.

El concejal de Participación Ciudadana, Desarrollo Rural, Pesca y Mundo Marino, Javier Bello, que estuvo acompañado por el concejal de Juventud y Deportes, José Ignacio González Nieto, agradeció la asistencia de mujeres de la AAVV del Poblado de Doña Blanca, resaltando que el mundo rural es una realidad en El Puerto, aunque el entorno sea predominantemente urbano, y apuntando que la Concejalía promueve la realización de este tipo de eventos para visibilizar la importancia que la agricultura posee en El Puerto.

En un acto al que también asistió la presidenta de la Flave, Milagros Muñoz, el teniente de alcalde subrayó la labor femenina que ha puesto en valor en nuestra zona diversas tierras familiares y extendió su gratitud a Yolanda Sanz, directora-Gerente del GDR Campiña de Jerez y Costa Noroeste de Cádiz, remarcando que la entidad siempre acude a la llamada del área y facilita la puesta en marcha de destacados proyectos, como el Camino de Villarana.



El manifiesto de este año, en el que la efeméride se conmemora con el lema “Las mujeres rurales, clave para un mundo sin hambre ni pobreza”, señala las muchas ventajas de vivir en pueblos y de trabajar en el campo, ya que se es la propia jefa y se actúa en contacto con la naturaleza, junto a los numerosos valores que se inculcan y desarrollan en esta filosofía de vida. El texto también reconoce la existencia de necesidades, como el fomento de la producción, el aprendizaje continuo, la facilitación de ayudas y apoyo al campo o un aumento de precios que beneficie directamente a los pequeños agricultores, junto a una mayor atención de las diferentes administraciones que revierta en infraestructuras.

La tesorera de la AAVV “El Castillo”, Mercedes Santamaría, apuntó que para la entidad es importante conmemorar el Día Internacional de las Mujeres Rurales “por recordar a quienes comenzaron la lucha, el ímpetu y el sacrificio en nuestras familias, lo que para nosotras supone un gran orgullo, porque hay que dar a conocer a la gente de ciudad a aquella que vive en los pueblos, animándoles a residir en ellos” y porque la celebración “sigue mostrando que las mujeres somos capaces de realizar cualquier tipo de trabajo, de no depender de nadie, y reconoce y fomenta la igualdad en este sector para que también seamos una pieza clave en el desarrollo rural”.

Por su parte, Yolanda Sanz, directora-Gerente del GDR Campiña de Jerez y Costa Noroeste de Cádiz, comentó que la entidad se une a la efeméride “porque defendemos que la igualdad real sigue siendo una meta a conseguir por mucho que se haya avanzado y porque nos comprometemos con el movimiento asociativo de mujeres rurales para apoyarlas en la dinamización, creación de redes y visibilidad de su realidad en los espacios de decisión”.

Sanz apuntó que, para contribuir a reducir la brecha rural, el GDR las apoya mediante formación y asesoramiento, priorizando que los fondos de desarrollo rural LEADER vayan a mujeres emprendedoras o proyectos con incidencia en género. Además, y con objeto de romper los techos de cristal, GDR las apoya específicamente incorporándolas en su Asamblea para oír su opinión y las empodera con su presencia en la Junta Directiva.

Yolanda Sanz concluyó afirmando que “en el caso de las mujeres hay aún muchas necesidades que cubrir desde la perspectiva de la conciliación, los servicios y la calidad de vida, que permitirían generar oportunidades para ellas no solo en el campo, sino en todos los sectores productivos, lo que contribuiría a fijar la población en nuestros pueblos y un desarrollo socioeconómico más equitativo”.