EL PUERTO.- La Audiencia Provincial de Cádiz ha condenado a un funcionario de la Agencia Tributaria de El Puerto de Santa María a dos años y diez meses de prisión por quedarse con más de 13.000 euros de varios contribuyentes ya fallecidos o con alguna discapacidad.

Según ha adelantado hoy Diario de Cádiz, la estafa se produjo en 2018 y 2019, aprovechando el funcionario sus atribuciones en el servicio de Gestión Tributaria de la AEAT.

La sentencia recoge que el funcionario presentó en nombre de los estafados una serie de autoliquidaciones de IRPF o rectificaciones para obtener una devolución ilegal que posteriormente fue abonada en la cuenta bancaria del propio funcionario, hasta que fue descubierto en el año 2019.



El modus operandi del funcionario era el de aprovecharse de personas con alguna discapacidad para realizar una rectificación de IRPF en su nombre, aumentando el porcentaje de discapacidad para conseguir así una mayor devolución que desviaba a su cuenta bancaria.

Igualmente, aprovechaba casos de fallecimientos para presentar autoliquidaciones a su favor.

Finalmente, el funcionario que ha reconocido los hechos ante el juez, ha sido condenado a una pena total de dos años y diez meses de prisión y a tres años y tres meses de inhabilitación para empleo o cargo público relacionado con la gestión y recaudación tributaria. Aunque no pisará la cárcel, habiendo quedado la pena suspendida a condición de que no vuelva a delinquir en los próximos tres años y al abono de una multa de 1.200 euros, así como la devolución del dinero estafado más los cargos correspondientes.