Todos tenemos motivos para rebelarnos, para escribir con el dolor del corazón que cada día nos puede más. Hasta que todo se controle, cada noticia es un pellizco más duro a nuestros sentimientos.
La imagen de camiones italianos llevando cadáveres nos entristeció, pero lo teníamos lejano. Sin embargo, las noticias sobre cadáveres en residencias conviviendo con otros residentes es espeluznante.
La gravedad nos da lugar a imaginar residencias abandonadas, personas desatendidas, cadáveres en las habitaciones… algo más que dantesco, tan dantesco que hay que matizar para no volverse loco.
Es de suponer que es un caso aislado –los menos–, que una investigación, si la hay, dejará al descubierto que se avisó para que retirasen los mismos pero que el colapso hospitalario lo impidió. Confío, y se ve, que los más vulnerables de nuestra sociedad frente a esta pandemia están siendo atendidos. Personal geriátrico se enfrenta, con sus miedos, a la atención de los mismos, y ellos son los más.
Por ello, merecen que pensemos en todos los trabajadores de las residencias, que nos sintamos orgullosos de ellos, porque un hecho dantesco no nos puede confundir para echar por tierra la enorme labor de las miles de personas que les siguen atendiendo, criticando a todo un sistema que hemos creado nosotros mismos.
De seguro que veremos más casos, como el cercano que tenemos en Alcalá. De seguro que veremos también mayores muestras de sacrificio, mayores muestras de apoyo, y también veremos casos dolorosos. También buscaremos en nuestra memoria, o miraremos a quien se siente a nuestro lado, posiblemente cogeremos el teléfono si la distancia es mayor, posiblemente nos saldrá un te quiero que valdrá por todos esos que nunca dijimos, los que nos callamos por falta de tiempo, por desidia o por un no sé. No pensemos que ha tenido que pasar esto para que nos demos cuenta de las pocas veces que decimos lo que tenemos que decir. Simplemente comportémonos como nunca debidos dejar de comportarnos… como seres humanos con virtudes y defectos, pero capaces de amar.