Javier Ramírez (Tribuna libre).- Lo admito, el título no debe hacer menos al desarrollo de este artículo de opinión, soy Javier Ramírez y soy el candidato de El Puerto 100x100 a la Alcaldía de El Puerto.

Los que vivimos día a día en El Puerto de Santa María podemos apreciar el desgaste que está sufriendo nuestra ciudad en el transcurso de esta legislatura, legislatura que se ha ido sosteniendo principalmente por el concejal de Fiestas, Flamenco, Patrimonio Histórico y Comercio, David Calleja. Ya se rumorea, y una parte interna del PP portuense lo corrobora, que para las próximas elecciones Calleja se plantea el no formar parte del equipo de gobierno con Germán Beardo para la campaña 2023-2027. Actualmente lo que se cuestiona es si Calleja optará por retirarse de la vida política o si, por lo contrario, pactará para mantenerse en el “proyecto” no tan político, que lleva cobrándose 8 años de las rentas de los portuenses y que, vio salida gracias aun proyecto de Levantamos (partido político local a lo Podemos). Este proyecto solo da falacias de lo que el pueblo quiere oír, sin más,una continuación de la actual política de comunicacióndel fenómeno Germán Beardo.

¿Cómo es posible que arrastremos una situación tan precaria en nuestra ciudad desde 2007? ¿Qué solución nos espera en la próxima legislatura?¿Qué podemos hacer los que entramos en política para cambiar el rumbo de la ciudad? Si tuviese respuesta para estás tres preguntas y las que me surgiesen con los problemas que lleva acarreando la política de esta nuestra localidad seguramente no estaría sentado en mi apartamento pensando en cómo cambiar esta situación, sino que estaría en la Plaza Peral solucionando de verdad los problemas de la ciudadanía portuense. De una manera u otra, voy viendo luz al final del túnel y vislumbrando el por qué nos encontramos en estas situaciones hoy en día a marzo de 2022.

¿Cómo es posible que arrastremos una situación tan precaria en nuestra ciudad desde 2007? Desde hace cuatro años me hago esta pregunta a diario. Siendo una pregunta recurrente en mis pensamientos, no le encuentro respuesta al cómo es que nos hemos quedado en un proyecto de ciudad y lo hundido que se encuentra El Puerto, tanto en lo estructural-administrativo como en lo económico. En las elecciones municipales de 2007 Hernán Díaz dejó la Alcaldía tras 16 años de mandato y nos llegó las políticas “liberalizadoras de la economía” de Moresco del 2007 al 2014 y de Candón del 2014 al 2015. Algo debe de ir mal en un Ayuntamiento si un alcalde como Moresco dimitía del cargo por presuntos “motivos personales”. Y es que estar prácticamente 16 años en la Alcaldía en solitario como estuvo Hernán, hace que la administración se asiente y que algunos actores hagan carreras internas e incluso cortijos. Un buen ejemplo de ello es Antonio Caraballo, miembro de la administración portuense que ha tenido a la plantilla de limpieza y recogida de basura 11 días en huelga por no “tener un contrato acorde sus exigencias”. Sí, a las exigencias de una persona que debería estar disfrutando de una buena jubilación que le ha quedado tras pasar por el Ayuntamiento de El Puerto.

No quiero sonar soez con el señor Caraballo, ya que por la corporación han pasado muchos “políticos”, o así se hacen llamar, y partidos, PP, PSOE, Partido Andalucista, Izquierda Unida, Podemos, Ciudadanos, Vox y dos agrupaciones de electores, Levantemos y Unión Portuense. Pero da la casualidad de que todos han vivido con las deficiencias del Ayuntamiento y de actores acomodados como Caraballo, pero da la casualidad de que los que ahora propugnan que El Puerto necesita un cambio, que los malos son los que están, no recuerdan que ellos también han gobernado y que estuvieron en el pellejo de Beardo y sus actores y que la ciudad se mantiene de la misma manera desde 2014.

Os lo expongo de otro modo, no vamos a mirar al equipo de gobierno PP y Ciudadanos, ya que muchos de los primeros llevan en los asientos del consistorio municipal más de 10 años y dentro de Ciudadanos ni se pincha ni se corta. Miremos en los que achacan, Vox con Leocadia, exconcejala en Urbanismo y Economía con Moresco, PSOE, Izquierda Unida y Levantemos y su paso anterior por la Alcaldía en 2015-19 dejó una ciudad con presupuesto y paro de enumerar ya que para poco más dan esos cuatro años. Podemos con Alejandro, más en hacerse hueco en la provincia esperando un sillón en el Parlamento Andaluz que en las calles de El Puerto, pero bueno “viene de nuevas”. Agrupación de electores, los que no son políticos, Unión Portuense y su único concejal, Javier Botella, vienen de 4 años de Levantemos en el área económica y ahora como marca blanca sin más, se adornan de tropecientas mociones presentadas, algunos aprobadas, pero sin que estas se repercutan en una mejora en la ciudad, es decir, papel mojado y comunicación beardista. El Partido Andalucista, entidad que debe estar orgullosa de haber tenido concejalías en El Puerto y de que su máximo representante, Antonio Jesús Ruiz, tenga unas grabaciones pululando por ahí en relación con la venta de Apemsa, y ni hablemos de Pozos Dulces. Fue tal la catástrofe de la gestión del PA que han tenido que cambiar de nombre y ahora se llaman Andaluces Levantaos, levantados debíamos de estar los portuenses con caceroladas en la casapuerta de algún exdirigente del PA-Andaluces Levantaos. Y así hemos avanzado 15 años y El Puerto continúa con la misma élite política y con el mismo estado de la ciudad, lo cual hace que empeore todo.

¿Qué solución nos espera en la próxima legislatura? Quiero ser sincero con mis vecinos y vecinas y quiero dejar claro que mi posición política me obliga a decir la verdad, la próxima legislatura será una legislatura perdida. Esto debería ser así para sacar nuestra ciudad de la quiebra en la que vive. Digo perdida,debido a que tendremos que remangarnos dentro del ayuntamiento y celebrar menos fiestas en las calles como ha estado haciendo Calleja. Durante los próximos cuatro años debemos de adecuar el Plan de Ajuste, sacar adelante los Presupuestos Municipales, disminuir el PMP a menos de 60 días y contratar a personal con la nueva RPT, estos deberían ser los primeros y serán los primeros pasos de El Puerto 100x100 para que el 2027-2031 tengamos la posibilidad de cambiarle la cara a nuestra ciudad por fuera, siempre y cuando renovemos el ayuntamiento por dentro.

¿Qué podemos hacer los que entramos en política para cambiar el rumbo de la ciudad? Esta quizás es la pregunta más fácil de las tres de contestar y lo haré en tres puntos:

  1. Señalar a los culpables de que la ciudad esté como está ahora, es decir, todos los políticos que llevan en el pleno desde 2014 cobrando de los contribuyentes y mirando para otro lado.
  2. Decir la verdad para que los ciudadanos sepan que, en el próximo ciclo político, 2023-2027, los que queremos mejorar la ciudad lo hagamos sin presiones, sin holgorios en las calles y trabajando de 7 a 22 para sacar la ciudad de la precariedad en la que se encuentra.
  3. Recordarles a los ciudadanos que El Puerto está en la misma situación estructural desde 2014, pozos dulces está igual, los barrios tienen los mismos desperfectos, el ayuntamiento sigue con falta de personal, y el PGOU y los Presupuestos Municipales siguen sin salir adelante.

Nos esperan tiempos difíciles a los que amamos y queremos El Puerto, pero con dignidad, renovación y sacrificio lograremos tener una ciudad al 100x100.