Para este viernes 4 de junio se había convocado un nuevo consejo de la empresa municipal El Puerto Global con unos puntos sobre la mesa, que evidencian –según Unión Portuense– “la mala gestión de German Beardo como presidente de la empresa, dejando todo el poder de decisión y la supervivencia de la empresa en manos de un gerente que está llevándola a la quiebra (424.318,99 € deuda total a 31.5.2021)”. Así lo explica Unión Portuense en el siguiente comunicado:

Desde Unión Portuense queremos denunciar el despropósito de la gestión de Beardo al frente de El Puerto Global. El consejo se vuelve a enfrentar a unas cuentas en negativo, donde la única solución que propone Beardo es seguir endeudándose y denunciar al propio Ayuntamiento, algo que ya intentaron hace unos meses. Como el Ayuntamiento, gestionado por Beardo, no paga las facturas de El Puerto Global, que también gestiona Beardo, este segundo intenta denunciar al primero, sencillamente kafkiano.

La razón principal por la que el Ayuntamiento no paga las facturas a El Puerto Global es porque éstas contienen los salarios sin presupuestar del gerente Rafael Serrano. El mismo que German Beardo y su cómplice, Curro Martínez, readmitieron por deseo y voluntad propia; a pesar de que ya existía un acuerdo firme de no readmisión del consejo y del propio presupuesto 2018 aprobado por Beardo.

La consejera de Unión Portuense, Desiré Oviedo, comenta al respecto:  "Es del todo incomprensible que las únicas soluciones que, tanto Beardo como Serrano, están buscando para sacar a la empresa de la espiral en el que ahora mismo se encuentra sea, por un lado, denunciar al propio Ayuntamiento que ellos mismos gestionan y, por el otro, a seguir autorizando a Serrano a solicitar préstamos, a pesar de que los bancos comienzan a cerrarle las puertas, ante su incapacidad de hacer frente a los prestamos ya concedidos.

Oviedo, finaliza el comunicado: “Nuestra formaciónlleva advirtiendo desde el primer día lo que supondría la reincorporación de Rafael Serrano a la empresa. El tiempo nos ha dado la razón. Una empresa que funcionaba sin conflictos y con cierres anuales en positivos antes de la entrada de Beardo a la alcaldía, ahora se encuentra en el caos absoluto, con un endeudamiento de 424.318,99 €, el cual pone en peligro la funcionalidad de todo el Ayuntamiento, así como a las 42 familias que se encuentran en riesgo de no cobrar sus nóminas, como ya ha venido sucediendo en meses anteriores, e incluso de perder sus puestos de trabajo”.