Puerta blindada para evitar el acceso no deseado...

Agentes de la  Policía Nacional han detenido en El Puerto de Santa María a seis personas como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas. Los agentes del Grupo Operativo de Apoyo  que realizan labores de prevención y erradicación del pequeño menudeo, observaron un continuo trasiego de personas que portaban droga tras salir de distintos domicilios de la barriada del 18 de julio.

Por todo ello, se inició una exhaustiva investigación que concluyó con el registro de tres domicilios, el desmantelamiento de dos puntos de venta de droga y la detención de seis personas pertenecientes a dos conocidos clanes de El Puerto, por un delito contra la salud pública. En los registros, se incautaron 2.900 euros, 210 gramos de cocaína pura y 3 gramos de sustancia de corte.

Fue necesaria la intervención de los GOES para poder acceder a una de las viviendas

La investigación policial comenzó en noviembre cuando los agentes del Grupo Operativo de Apoyo  de la Policía Nacional que tienen encomendada la prevención y erradicación del pequeño y mediano tráfico de sustancias estupefacientes, realizaron  vigilancias preventivas en la Barriada del 18 de julio de El Puerto de Santa María.



Durante las vigilancias pudieron observar como a diferentes horas y distintos días de la semana, personas de diferentes clases sociales, entraban y salían de dos viviendas de la zona, portando droga encima. Por todo ello, se inició una investigación para obtener los indicios necesarios que probasen la actividad delictiva que se estaba llevando a cabo en dichos domicilios. Tras conseguir las pruebas necesarias, se solicitó la entrada y registro de uno de los puntos de venta, que constaba de dos viviendas en el mismo bloque de pisos.

En los registros domiciliarios, debido a las altas medidas de seguridad de los moradores, fue necesaria la intervención de los GOES (Grupo Operativo Especial de Seguridad) de la Policía Nacional para acceder a una de las viviendas encartadas. Dicha vivienda, constaba de una puerta blindada y anclada con hasta cinco cerrojos. Ante la imposibilidad de abrir la puerta, los GOES  accedieron al domicilio a través de la pared próxima a la puerta.

En el registro se intervinieron 2.900 euros empaquetados en papel film ocultos en un armario. Dichas entradas y registros concluyeron con la detención de las dos féminas encartadas, pertenecientes a un conocido clan de El Puerto, por un presunto Delito Contra la Salud Pública.

Usaban cámaras ocultas en los motores del aire acondicionado,

Nuevo punto de venta de droga

Los agentes, una vez desarticulado dicho punto de venta, siguieron trabajando en la conocida barriada portuense, ya que mientras realizaban las vigilancias pertinentes, observaron trasiego de personas en otra vivienda de la zona, con el fin de adquirir droga.

Ante la posible existencia de un nuevo punto de venta de droga, comenzaron a realizar nuevas vigilancias, comprobando que el morador, llevaba a cabo la actividad ilícita junto a tres personas más, las cuales se encargaban de realizar diferentes actividades dentro del negocio de venta de droga. Pudieron observar que la vivienda constaba de fuertes medidas de bunkerización, tales como dos puertas blindadas, doble reja en las ventanas, cámaras ocultas en los motores del aire acondicionado grabando la vía pública, así como  de “aguadores”, que se encargaban de avisar de la presencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.



Tras conseguir la orden de registro, buscaron el momento idóneo para realizar la entrada en la vivienda de la forma más rápida y eficaz. Los agentes actuantes, aprovecharon un descuido de las personas que se encontraban en la vivienda para realizar el registro y proceder a su detención. Se incautaron 210 gramos de cocaína pura, 3 gramos de sustancia de corte y un palo con un cuchillo a modo de lanza.

La droga incautada podría haber cuadriplicado su peso tras ser mezclada con otras sustancias de corte, llegando incluso a alcanzar un peso de 800 gramos al consumidor final.

Los cuatro detenidos pertenecientes a otro conocido clan portuense, pasaron a disposición judicial, decretando el juez el ingreso en prisión de dos de ellos por un Delito Contra la Salud Pública y  otro de pertenencia a Organización Criminal.