Desde la asociación Libres, en el Día Internacional de las Mujeres, reivindicamos la igualdad real entre hombres y mujeres en todos los ámbitos de la vida y la sociedad. Por eso reclamamos:
- El fin de las violencias machistas, entendidas como aquellas que se ejercen a cualquier mujer por el mero hecho de serlo. Tanto en el hogar, como en el trabajo, el ámbito educativo, sanitario, religioso, los medios de comunicación, instituciones públicas o privadas y la sociedad en general.
- El reconocimiento de la violencia sexual como otra de las formas de violencia machista. A fin de proveer a las mujeres de medidas de protección para evitarla, así como su reconocimiento, el trabajo y los medios para su reparación a nivel físico, psicológico, emocional y social.
- El reconocimiento de la sociedad de que las mujeres somos dueñas de nuestros cuerpos, nuestras vidas, nuestros deseos y decisiones.
Exigimos el fin de la violencia hacia las personas con identidad de género no binaria (es decir, que no se reconocen ni como hombre ni como mujer), a las mujeres lesbianas y bisexuales, así como a las personas transgénero y transexuales. Que se reconozca, respete y valore a la diversidad sexual, de identidad y expresión de género.
- Que la educación afectivo-sexual y de identidad de género se contemple en el currículo escolar, y sea integral, libre de estereotipos sexistas, racistas y LGTBIfóbicos.
- Que se imparta una educación sexual de calidad que, además de informar a las y los jóvenes sobre los métodos anticonceptivos y de prevención de enfermedades e infecciones de transmisión sexual, les capacite para saber qué implicaciones tiene practicar sexo, además de la posibilidad de disfrutarlo. Es fundamental crear conciencia sobre la capacidad de decisión de las chicas jóvenes en todo momento y del respeto de los chicos a las decisiones de ellas, así como a no verlas como meros objetos para su propio placer.
- Que no se criminalice a las mujeres que hayan tenido que abortar. Es fundamental tener en cuenta que el aborto es un trance difícil que ninguna mujer quiere pasar. Para ello es fundamental las medidas mencionadas anteriormente, ya que en esta decisión influyen múltiples causas (económicas, sociales, educativas, psicológicas, abusos/violación-es, precariedad laboral...). El apoyo a las mujeres en todos estos ámbitos evitaría a muchas mujeres pasar por tan traumática situación.
- Que se trabaje para garantizar los derechos de las mujeres migrantes, creando los cauces adecuados para una humana y digna migración de las personas, con especial incidencia hacia las mujeres, que son las que mayor violencia sufren en los procesos migratorios. Atención humanitaria en el mar, trato digno y eliminación de las cárceles encubiertas, llamadas CIE's (muchas con penosas condiciones higiénico-sanitarias), destinadas a personas que no han cometido delitos sino una falta administrativa. Ninguna persona es ilegal.
- Para que se visibilice y reconozca el valor del trabajo doméstico y de cuidados que realizamos mayoritariamente las mujeres, así como los derechos de quienes lo realizamos.
- Que se formulen políticas que promuevan la corresponsabilidad por parte de los hombres y la sociedad respecto a esas tareas.
- Garantía por parte de los poderes públicos de servicios públicos dignos y de protección social a aquellas mujeres que, por tener que dedicar parte de su vida a las labores domésticas y de cuidados a familiares dependientes, no han podido cotizar a la Seguridad Social, lo cual repercute negativamente en sus prestaciones y pensiones.
- Por la eliminación de los techos de cristal en las carreras laborales de las mujeres, así como la equiparación salarial entre hombres y mujeres en las mismas categorías profesionales.
- Para la eliminación de la división sexual del trabajo que condena a las mujeres a la precariedad laboral y la creación de alternativas para las trabajadoras migrantes.
- Por la construcción de una economía basada en el respeto a las personas y el entorno natural, buscando un desarrollo sostenible y eficiente que dignifique al ser humano como sociedad en su conjunto por encima de los intereses individuales.
Por todo ello, nos unimos y promovemos el paro Internacional de Mujeres del próximo viernes, día 8 de marzo de 2019, porque si nosotras paramos, el mundo para.