EL PUERTO.- El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de El Puerto de Santa María anuncia que comienza los trámites para otorgar la Medalla de Oro de la ciudad a las hermanas comendadoras del Convento del Espíritu Santo.
De hecho, ya se está trabajando en la elaboración del expediente para la concesión de esta distinción a la sede portuense de esta congregación, para agradecerles la enorme labor caritativa y solidaria que han realizado en El Puerto de Santa María, con una constancia digna de admirar, siendo el convento más antiguo de la ciudad, que comenzó a funcionar a finales del siglo XV.
Con este gesto, desde el Ayuntamiento de El Puerto se reconoce públicamente el gran trabajo social y la ayuda incondicional y constante a los más desfavorecidos.
Para muchos portuenses e incluso foráneos estas monjas de clausura son sinónimo de dulzura con sus dulces artesanales vendidos a través del torno. Para otros, las hermanas que siempre están dispuestas a ayudar al más débil, bien sea con un plato de comida o con un momento compartido para que no se sientan solos. Siempre al lado de los más desfavorecidos, antes, ahora y siempre. Transmitiendo sus férreos valores a cientos de generaciones a través del Convento del Espíritu Santo.
Durante estos días de confinamiento y Estado de Alarma han estado al pie del cañón protegiendo, desde su clausura, a los más débiles y ese esfuerzo increíble e impagable tiene que tener un reconocimiento oficial más allá del agradecimiento público.
Estas religiosas recibieron como herencia de su padre fundador, el beato Guido de Montpellier, la práctica de las obras de misericordia y han sido sustento fundamental de El Puerto de Santa María a lo largo de su historia, cargada de buenos momentos y otros no tanto. Su torno siempre abierto para ayudar a los demás las hace merecedoras sin duda de esta distinción que sabemos que cuenta con el respaldo de hermandades, colectivos y particulares, que conocen perfectamente su grandeza y su trayectoria.
El equipo de Gobierno precisa que se propondrá al Pleno Municipal esta concesión, el reconocimiento más alto que puede dar la ciudad, para devolverles aunque sea simbólicamente el sentimiento de orgullo y de agradecimiento que sentimos los portuenses al contar con ellas en El Puerto.