El último informe de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, de la Consejería de Salud y Consumo, sobre las capturas realizadas entre el 7 y el 11 de agosto, revela un aumento "muy importante", clasificado de Grado IV --más de 1.000 mosquitos--, de la densidad poblacional de hembras de mosquito potencialmente transmisoras de Virus del Nilo Occidental en Barbate (Cádiz), cuya estación de trampeo está ubicada en un entorno rural de su término municipal, así como del Grado II -- entre 100 y 500 mosquitos-- en Vejer de la Frontera (Cádiz).

El informe señala que ha disminuido drásticamente con respecto a la semana anterior el número de hembras de Culex perexiguus capturadas en Villamanrique de la Condesa (Sevilla) y destaca que Málaga baja a Grado I por disminución de la densidad de hembras de mosquitos transmisoras, ha informado la Junta en una nota.

En relación con la circulación del virus en las estaciones de trampeo, en los análisis a tiempo real realizados a fecha de este informe se ha detectado presencia del virus del Nilo Occidental en las capturas realizadas en el término municipal de Barbate (Cádiz) en lotes de mosquitos de la especie Culex perexiguus.

El resultado de las 25 trampas restantes de las provincias de Sevilla, Cádiz, Huelva y Málaga ha salido negativo en cuanto a circulación de virus en mosquitos.

Por otro lado, el servicio de vigilancia epidemiológica de aves silvestres de la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía ha notificado la existencia de un pollo de águila imperial con virus del Nilo Occidental en el municipio de Peñarroya-Pueblonuevo (Córdoba) y otro en La Carolina (Jaén).

La Estación Biológica de Doñana sigue detectando presencia del virus del Nilo Occidental en mosquitos capturados en el término municipal de La Puebla del Río (Sevilla).

El Servicio de Sanidad Animal, de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, ha notificado un caso confirmado de caballo con virus del Nilo Occidental en el municipio de El Pedroso (Sevilla). Se trata de la segunda vez que se detecta un caballo con virus en este municipio durante esta temporada.

El caso de fiebre del Nilo occidental en Arroyomolinos de León (Huelva) confirma la necesidad de disponer de un sistema adecuado de vigilancia y control del virus en Andalucía, junto con la importancia de que la población tome medidas adecuadas para evitar las picaduras de mosquitos.

Las delegaciones territoriales de Salud y Consumo de las provincias donde se ha detectado circulación de virus han comunicado a los responsables municipales las actuaciones de salud pública que deben adoptar según lo previsto en el Programa de vigilancia y control integral de vectores transmisores de FNO en Andalucía para reducir de forma relevante las probabilidades de transmisión a la población.



La vigilancia entomológica (vigilancia de mosquitos) es la herramienta clave para la identificación precoz de la circulación del virus del Nilo occidental en Andalucía, permitiendo adoptar las medidas de vigilancia y control adecuadas destinadas a disminuir el riesgo de la población andaluza.

El seguimiento periódico de las poblaciones de vectores (mosquitos) mediante trampas situados en puntos estratégicos, permite conocer las distintas especies de mosquitos, la densidad poblacional y la detección de la presencia del virus del Nilo occidental en especies transmisoras como son Culex perexiguus, Culex pipiens, Culex modestus y Culex laticinctus.

La localización de los emplazamientos para las trampas se realiza en 26 municipios de Andalucía, por estar estos clasificados como áreas de riesgo alto o moderado y para obtener información sobre el progreso del vector en territorios con niveles de riesgo inferiores.

El objetivo que se persigue es la detección temprana del aumento de la densidad de mosquitos transmisores y la circulación del virus en los mosquitos para informar a la administración local que intensifique las acciones de vigilancia, control y comunicación en su territorio, disminuyendo así las probabilidades de transmisión a humanos.

El criterio que se ha utilizado en la localización de las trampas en los territorios seleccionados ha sido el de zonas donde sea esperable una abundancia importante de las cuatro especies principales vectores (mosquitos) del virus con anterioridad a su mayor presencia en los núcleos poblacionales, es decir zonas con presencia de agua estancada con baja salinidad.

Por otro lado, en Andalucía se llevan a cabo más actividades de vigilancia entomológica de mosquitos transmisores del virus del Nilo occidental.

Cabe destacar la labor de la propia Estación Biológica de Doñana (CSIC) con siete estaciones de trampeo en la provincia de Sevilla y la ejecución del Proyecto Arboprevent, que incluye 800 puntos de muestreo en las provincias de Sevilla, Huelva y Cádiz, de los cuales 400 se están muestreando este año y 400 durante el 2024. El Servicio de Control de mosquitos de la Diputación provincial de Huelva cuenta con 23 estaciones de trampeo por la citada provincia.

Además, esta información se coordina y se integra con otras vigilancias realizadas en los caballos y aves, por las autoridades autonómicas de sanidad animal y fauna silvestre, y con la vigilancia epidemiológica humana, de todas ellas se realiza igualmente su seguimiento desde esta Dirección General.