Agentes de la Policía Local de El Puerto auxiliaron en la tarde de este sábado, en la Playa de La Puntilla, a un hombre de 59 años, natural de la población sevillana de El Cuervo.
Tras recibir llamada en Jefatura alertado de que se encontraba en la arena de la orilla con un síncope, convulsionando, se personaron de forma inmediata en la playa salvándole la vida en colaboración con una bañista que lo asistió en el primer momento, que lo mantuvo en posición de seguridad, tratando de mantenerlo consciente mientras llegaban los efectivos.
Comprobando que todavía no había llegado la ambulancia, los agentes decidieron envolver al bañista en toallas para así trasladarlo al paseo marítimo con mayor celeridad, agilizando el camino hasta el mismo, facilitando el desplazamiento, ya que se encontraba a unos doscientos metros. Lo portaron a peso convulsionando de forma intermitente y con la mirada perdida, tratando en todo momento de que no perdiera la consciencia.
Cuando ya habían decidido trasladarlo en el patrullero al hospital para no perder un valioso tiempo ya que cada vez le costaba más reaccionar, llegó la ambulancia medicalizada con el equipo sanitario, que le puso un respirador y una vía para proceder a su traslado urgente al Hospital Santa María de El Puerto.
El último parte médico es que se encuentra estable, acompañado por su esposa, y que ya lo han remitido a planta.
La rápida actuación de los agentes y de la bañista que lo auxilió en los primeros minutos, poniéndolo en posición lateral de seguridad, fue decisiva para salvar la vida de esta persona.
La Policía Local recomienda máxima precaución a todos los usuarios de la playa en estos primeros días de buen tiempo, en los que los más madrugadores aprovechan estos días para disfrutar de la costa, recordándoles que los servicios de socorrismo y salvamento se activan cuando comienza la temporada alta, es decir el 15 de junio, y por tanto deben tener mayor cautela con la temperatura del agua, las digestiones o las corrientes, entre otros factores que pueden poner en riesgo a los bañistas