Cuando el cuerpo deja de vivir, el alma retorna a su lugar. "Polvo eres y en polvo te convertirás". Son algunas de las frases que oímos sin cesar cuando alguien nos deja para siempre pero cierto es que poco consuelan cuando el vacío se mezcla con lo a veces injusto de la muerte.
En la tarde de este lunes ha fallecido don José María Gallardo, querido profesor de Filosofía del colegio Guadalete (Grupo Attendis).
Quien hizo que Platón, Santo Tomás de Aquino o Kant entrase en la vida y en la psique de muchos adolescentes, ha partido para siempre con el Creador al cual entregó siempre su trabajo y sus esfuerzos.
Esta pandemia que tanto nos ha arrebatado, ha querido también sumar a las almas en Cristo, la de don José María que tantísimo ha luchado por mantenerse y que finalmente este lunes ha partido.
Yo tuve la suerte de conocerlo durante el último curso 2020- 2021 y pude ver en él a alguien culto, justo, de verbo interesante, calidad humana e inquietudes espirituales .
Hoy quedan huérfanos sus compañeros y su familia, así como toda una prelatura que reza por su alma.
Deseo que allá donde esté siga dando lecciones de bondad y conocimiento.
DON JOSE MARÍA
La muerte levantó con fuerza el vuelo
y detuvo las dos negras manecillas
del reloj sencillo y pobre de la herida
tornando la esperanza en desconsuelo.
Platón sonrió y le dijo al Dios del cielo
aquí llega un literato a mi medida
que ha pasado treinta años de su vida
exponiendo mi pensar y mi veneno.
Con tu ser mesiánico de justicia
tu quehacer santo, elegante, puro y bueno,
regalaste tus valores y sonrisas
a los hombres que un día adolescentes fueron.
Mil chiquillos de los pueblos marineros
hoy te rezan querido José María
pues en mi gran Puerto de Santa María
inculcaste el ideal: un mundo nuevo.
Ya no enseñas terrenal filosofía,
ahora enseñas en la gloria, que es tu reino.