EL PUERTO.- El colegio El Centro Inglés ha afrontado en los últimos meses, como el resto de centros, un reto especial: mantener su nivel de actividad y calidad académica en plena pandemia de coronavirus. En el último trimestre del pasado curso, el confinamiento no fue un impedimento para impartir las clases en casa siguiendo los mismos horarios presenciales, lo que permitió al alumnado seguir con el ritmo de aprendizaje de manera telemática. 

Desde el mes de junio, el Centro comenzó a desarrollar un plan con cinco escenarios posibles para afrontar las diferentes situaciones de riesgo para alumnos, familias y personal. Durante el verano, dicho plan se ha intensificado con la adaptación de las instalaciones, no solo a la normativa del Ministerio, sino a esos cinco escenarios para regresar a las aulas de manera presencial con las máximas garantías de higiene y seguridad. 

El Titular y Director de El Centro Inglés, David Randell, hace un balance muy positivo del trabajo realizado. El Colegio lo tiene todo organizado para poder afrontar el curso completo hasta junio. Según vayan avanzando los meses y la evolución del virus, realizarán todos los ajustes necesarios al protocolo planteado, regresando a las clases desde casa si fuera necesario.  

Pregunta: ¿Cuáles son los principales cambios que han realizado este verano en sus instalaciones para adaptarse al coronavirus?

Respuesta: Gracias a la ampliación que realizamos hace 2 años  y al esfuerzo realizado este verano para ampliar aún más las aulas, tenemos capacidad para desdoblar las clases y reducir de este modo los grupos, por lo que podemos garantizar una distancia mínima de 2 metros entre mesas. Nuestro objetivo es la máxima seguridad para continuar con el proyecto Educativo, que busca la excelencia en jóvenes bien preparados para la sociedad del mañana. Por ello, las instalaciones cuentan con multitud de espacios de aprendizaje que ahora hemos adecuado a la nueva situación.

Además, hemos adaptado diferentes puertas de entrada para garantizar flujos y evitar cruces del alumnado. Hemos invertido en más espacios con fuentes y lavabos para intensificar la frecuencia de higiene entre el alumnado. Y por supuesto, mencionar la dotación de recursos informáticos, materiales y humanos para que el alumnado y el profesorado puedan mantener clases online y reuniones con otros compañeros de manera no presencial. Hemos apostado y basado el plan en la tecnología, pero eso incluye la ampliación de la plantilla docente y una innumerable dotación de materiales. Tal y como se contempla en los escenarios, en caso de que se decrete algún estado cuarentena, los alumnos continuarán con su plan de estudios de manera online.

David Randell junto a una imagen de Linda Randell, fundadora de El Centro Inglés de El Puerto. / EA

P: ¿Qué balance hace del último trimestre del curso pasado en pleno confinamiento?

R: ¡Un reto enorme de todo el equipo! Grandísimos profesionales que han sabido estar a la altura para que nuestros alumnos continúen con sus clases y con su desarrollo, tan necesario, que no debe verse afectado por factores como el COVID. Estamos orgullosos del resultado, así como lo están nuestras familias. Es cierto que el camino que ya teníamos andado con ECIONLINE y 1:1 nos ha beneficiado, no obstante, el confinamiento ha sido un detonador e impulsor para que alumnos y profesores desarrollasen su competencia digital para realizar las clases online de manera natural.

P: ¿Qué cambios en el ámbito académico han realizado para este curso teniendo en cuenta la experiencia de la teleformación con que acabó el curso pasado?

R: La mayor parte de nuestro proyecto curricular se mantiene intacto aprovechando los espacios que como Centro tenemos. También la tecnología, con la implantación total de libros digitales y OneNote, trabajo colaborativo online y la segunda transformación de nuestro profesorado en un año, son elementos fundamentales para impartir las clases de manera online. Aunque lógicamente hay adaptaciones. Un ejemplo es la programación de educación física o la de música, ambas tienen que adaptarse. Los alumnos no pueden tocar un instrumento de viento con la mascarilla puesta tal y como nos indica la norma.

P: ¿Qué preocupaciones les han trasladado estos últimos días los padres de alumnos?

R: Al igual que toda la sociedad, la preocupación general es la seguridad de la salud, un aspecto que hemos mimado en todos los niveles, incluso llegando a establecer un plan con 2 metros de distanciamiento y trabajando al detalle en medidas preventivas y organizativas para los diferentes escenarios, los cuales pueden ser visualizados por los padres desde la Plataforma ECINET (para familias). También, para mayor tranquilidad de las familias, hemos mantenido sesiones informativas online con la finalidad de aclararles sus dudas y preocupaciones. Sin embargo, no debemos olvidar que todo esto se lleva a cabo para que nuestros alumnos vengan a su colegio a aprender, a socializar, vaya, a seguir creciendo.

P: Acaba de comenzar el curso, ¿qué sensaciones les transmiten los alumnos?

R: Tienen ganas de volver a su Colegio, volver a su rutina. Lo expresan de una forma u otra, unos con nervios, otros con felicidad. En general, todos entienden bien la situación y están preparados, muy posiblemente más que nosotros, para este nuevo Colegio que les hemos preparado.

P: ¿Cómo se han planteado las actividades extraescolares?

R: En junio ya se tomó la decisión de cancelar todos los viajes internacionales, y ahora en agosto hemos cancelado todas las actividades fuera del Centro. Afortunadamente, dada la gran variedad de ellas y la amplitud de las instalaciones podemos llevar a cabo muchas de ellas aquí, pero queremos centrarnos en el inicio de curso, en la seguridad del alumnado y las actividades extraescolares quedarán pendientes del rumbo del Centro en las siguientes semanas.

P: El Centro Inglés suele llevar a cabo un programa de conferencias sobre cuestiones relacionadas con la educación. ¿Cómo lo han planteado este curso?

R: Seguimos en marcha y muy activos, el proyecto está desarrollado y fijaremos las fechas cuando tengamos una situación más cierta de los riesgos. Lógicamente, lo primero es la seguridad, debemos ser responsables y rigurosos. Y si finalmente no puede ser, pues organizaremos actividades online para no perder algo tan positivo como es «conectar con la sociedad» para hablar de temas educativos, emocionales, empatía…

Recordamos que para este curso contamos con Elsa Punset, Ramón Barrera y José Ramón Gamo.

P: Nadie lo desea, pero, en caso de un nuevo confinamiento, ¿cómo han planificado que los alumnos puedan seguir con su formación en la distancia?

R: Nuestro escenario red está preparado trabajando 1:1 desde Primaria a Bachillerato. Ya tenemos todas las programaciones planteadas para volver a clases online si fuera necesario. ECIONLINE funcionó muy bien durante el curso pasado y este curso contamos con el rodaje del anterior y la experiencia de alumnos, familias, profesores y personal.

Entendemos que puede llegar a ser normal que un alumno o un grupo se vean obligados a llevar a cabo una cuarentena en un momento determinado. Asumir esto nos ayudará a realizar la transición, si llega el momento. Ojalá que no, pero…, es la realidad que nos ha tocado vivir.

P: ¿Pueden los alumnos extraer lecciones de vida de esta crisis sanitaria?

R: Por supuesto, y además deben. Uno de nuestros lemas durante el confinamiento ha sido «COVID makes us better». Durante estos últimos meses hemos creado nuevos hábitos, que siempre son buenos para el desarrollo neuronal. Y estoy convencido de que muchos de estos hábitos nos servirán para el futuro. Debemos mirar el lado positivo de los que estamos viviendo.

La posibilidad de adaptación, superación y, al mismo tiempo, la empatía y la solidaridad con la sociedad se les transmite desde pequeños en ECI para que siempre tengan una actitud positiva ante la vida, o como reza nuestro lema: Lifelong love of learning.