Antonio Fernández, David de la Encina y Germán Beardo.
Comunicado (Unión Portuense).- Hemos asistido en estos días al espectáculo mediático que, en plena precampaña, nos han metido de lleno los partidos tradicionales que buscan desestabilizar gobiernos y desprestigiar al contrario a escasas fechas de unos comicios. La guerra sucia y las aguas fecales de las cloacas del “establishment” cada vez huelen más y peor en El Puerto descentrando el principal objetivo por la que los políticos locales se deberían dedicar temporalmente a lo noble acción de gobernar la localidad: los vecinos y vecinas, sus problemas diarios y, por su puesto, a los retos de una ciudad que no parte de sus mejores momentos para abordar el futuro a medio y a largo plazo.
Unión Portuense se siente abrumada como formación política y avergonzada como formación ciudadana por el contenido del famoso mail del Alcalde, el interés de alguien que viene de casta y familia política queriendo mantenerse en la carrera y, además, escalar a marchas forzadas queriendo nadar y guardar la ropa, arriesgando sin arriesgar y partiendo de unas condiciones ventajosas respecto a los demás. Trepar en la administración a costa de instituciones y organismos públicos pagados por todos y todas es deplorable. La intención y los valores de cada persona se ponen en evidencia cuando estos mails públicos-privados afloran a la luz y te dejan en evidencia por fuego amigo, enemigo u ambos frutos, sin duda, del sistema de grandes partidos de los que Unión Portuense es contraria y antítesis como alternativa política.
Tampoco queremos para El Puerto líderes y candidatos que manejen las finanzas de su partido como si fuera la caja registradora de su particular cortijo. Si el que pretende gobernar como Alcalde es polémico por estas supuestas prácticas, habría que pensar muy bien el que la ciudadanía lo pusiera al frente de unos presupuestos municipales de 100 millones de euros que deben impulsar el desarrollo de un enclave estratégico para la Bahía y Andalucía como es El Puerto de Santa María. Líderes políticos envueltos en polémica desde que accedieron a ello y que para colmo de males no han cotizado fuera de su estructura de partido o fuera de las instituciones públicas.
Ante el espectáculo otros ven la oportunidad para rellenar ese vacío programático que les caracteriza y con el que quieren optar al sillón. Les basta con ser cargo de confianza a sueldo de una institución cercana para que, durante meses, fuera de un control de resultados laborales, de horario y movilidad, le pueda dedicar tiempo a sus propias ansias de poder.
Y ahondando en la crisis municipal, los ex socios de Gobierno que a causa de la inexperiencia y de las órdenes recibidas, atendiendo más a confluir con posiciones más rentables electoralmente, abandonan el barco cuando está haciendo aguas por todos lados provocando una cortina de humo que oculte las vergüenzas de unos concejales cuyo rédito en gestión han dejado mucho que desear, pasando desde las consignas revolucionarias del cambio a las letras consabidas del continuismo y la improvisación.
El esperpento de reestructuración del Gobierno pone a Unión Portuense en guardia ante el atisbo de parálisis real durante los dos meses restantes y que, sin duda, van a animar más el teatro en los medios de comunicación y el autobombo sin sentido ni proyecto de ciudad.
Desde Unión Portuense queremos revindicar la transparencia en la futura campaña, así como la independencia de poderes fácticos ajenos y lejanos a nuestro Puerto. Queremos poner en valor un candidato, Javier Botella, que, sin padrinos ni doble juego, con recursos personales propios, con tesón y mucho tiempo dedicado quiere ser el Alcalde de una ciudad que le hace falta un Gobierno con determinación y fuerza que ponga fin al hastío en el que nos han metido políticos como los ahora cuestionados durante años.
