El Castillo de Doña Blanca vuelve a convertirse en epicentro de la investigación arqueológica con la campaña que la Universidad de Cádiz (UCA) desarrolla desde el pasado 1 de septiembre y que se prolongará hasta el 10 de octubre. Veinte años después de la última excavación sistemática, el proyecto se centra en documentar con detalle la entrada monumental de la antigua ciudad fenicia, considerada una de las más relevantes del Mediterráneo protohistórico.
La intervención está dirigida por la catedrática de Prehistoria Ana María Niveau de Villedary junto al Grupo de Investigación Phoenix Mediterránea de la UCA, con financiación de la Diputación de Cádiz a través del programa UCAINNOVA, y la colaboración de la Junta de Andalucía, propietaria del yacimiento, y del Ayuntamiento de El Puerto. Los trabajos cuentan además con la participación de estudiantes del Grado en Historia y de varios másteres en Arqueología y Patrimonio.
El proyecto combina excavación arqueológica en extensión con técnicas punteras de prospección no invasiva, como el georradar (GPR) y la prospección geomagnética, que permiten definir con precisión el trazado del acceso principal y elaborar mapas del subsuelo sin dañar las estructuras. En esta fase participan la Unidad de Geodetección de la UCA, dirigida por Lázaro Lagóstena Barrios, y el Servicio de Geofísica, Geomática y GIS de la Universidad de Cantabria, coordinado por Jesús Ignacio Jiménez Chaparro.
La excavación se concentra en la zona norte del yacimiento, donde se presume la ubicación de la entrada monumental de la última fase de la ciudad fenicio-púnica, vinculada a la ocupación cartaginesa. También se han documentado restos de una alquería medieval, un enterramiento romano sobre la muralla púnica y varias estancias con vasijas en su posición original, lo que aporta información valiosa sobre las fases anteriores a la muralla helenística.
El Castillo de Doña Blanca, descubierto en 1979, fue excavado hasta 1991 bajo la dirección del profesor Diego Ruiz Mata. Tras intervenciones puntuales en los años noventa y principios de los 2000, permaneció sin excavaciones sistemáticas hasta 2024, cuando la UCA reanudó los trabajos bajo la dirección de Ana María Niveau. Con esta campaña, se avanza en el conocimiento de la planificación urbanística y defensiva del asentamiento, y se sientan las bases para un Plan General de Investigación que garantice su conservación futura.
El alcalde Germán Beardo, acompañado por los concejales de Turismo y de Cultura, visitó la excavación para conocer los avances y destacó la importancia de reforzar el compromiso municipal con la puesta en valor de uno de los yacimientos arqueológicos más importantes del Mediterráneo y un referente del turismo cultural.