El Puerto de Santa María celebrará este sábado 22 de noviembre la II Marcha por la Infancia, una actividad que reunirá a colegios, familias y asociaciones para visibilizar los derechos fundamentales de los niños y niñas en el marco del Día Mundial de la Infancia. La convocatoria promoverá un espacio de convivencia y concienciación, con un recorrido que partirá a las 11:00 horas desde la Plaza de Toros y finalizará en Isaac Peral, donde se leerá un manifiesto. Durante todo el trayecto, la agrupación Batu Puerto animará a los participantes con música en directo.
La cita cuenta con la implicación de la comunidad educativa, ya que están invitados todos los colegios de infantil y primaria, así como centros de salud y asociaciones locales. El objetivo es reforzar mensajes clave sobre salud, educación, protección, igualdad, vivienda, alimentación y derecho al juego, pilares reconocidos en la Convención sobre los Derechos del Niño.
La Concejalía de Bienestar Social, organizadora del evento, participará junto a las áreas de Igualdad, Educación y Deportes y Juventud, cuyos responsables acompañarán a los menores durante la marcha. La concejala Carmen Lara intervendrá al final del acto con la lectura del manifiesto oficial. El cartel ya se ha distribuido entre los centros educativos para impulsar la participación.
Esta iniciativa se complementa con la próxima creación del Consejo Local de Infancia y Adolescencia (CLIA), un órgano previsto entre el 15 y el 20 de diciembre que reforzará la voz y representación de los más jóvenes en la vida pública, conforme a la Ley 4/2021 de Infancia y Adolescencia de Andalucía. El CLIA estará integrado por 52 miembros —26 titulares y 26 suplentes— elegidos entre alumnado de 6º de Primaria de los centros portuenses, quienes recibirán formación específica para intervenir en asuntos de igualdad, medio ambiente, salud y educación.
Con acciones como la Marcha por la Infancia y la constitución del CLIA, el Ayuntamiento reafirma su compromiso con un modelo de ciudad que protege, escucha y empodera a sus niños y niñas, garantizando su participación real en las políticas locales y su desarrollo en un entorno seguro y justo.











