El cuerpo de Borja Guerrero, gaditano de 36 años muy vinculado al mundo del flamenco, fue hallado sin vida en aguas de Marruecos, según confirman fuentes de la Guardia Civil. Su desaparición mantenía en vilo a familiares, amigos y vecinos desde el pasado 29 de junio, cuando su embarcación sufrió un vuelco en alta mar.
Borja era uno de los dos tripulantes de una pequeña embarcación recreativa que zarpó aquel domingo desde Cádiz capital, junto a José Antonio M. A., un joven de 25 años, vecino de El Puerto de Santa María y, según ha trascendido, miembro de la Armada.
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Ambos partieron desde la zona de Santa María del Mar, y según testigos, sufrieron un percance en el espigón, que provocó daños en la embarcación. Cruz Roja llegó a requerirles que regresaran a tierra por seguridad, pero decidieron continuar navegando hasta la zona de Torregorda. A unas 15 millas mar adentro, la embarcación volcó.
El caso cobró dimensión tras la publicación de alertas de búsqueda independientes por parte de SOS Desaparecidos, que más tarde se unificaron al confirmarse que ambos casos estaban relacionados.
El joven portuense José Antonio logró sobrevivir 48 horas a la deriva, encaramado a los restos de la barca, hasta ser localizado por un carguero a más de 48 millas del punto del accidente, al sureste del cabo Trafalgar. Fue rescatado con síntomas de hipotermia y trasladado a Puerto América, en Cádiz.
Durante todos estos días, efectivos de Salvamento Marítimo, SAR y Guardia Civil mantuvieron activo un amplio dispositivo de búsqueda por mar y aire, con la colaboración de familiares, amigos y ciudadanía. Finalmente, se ha confirmado que el cuerpo de Borja fue hallado en aguas internacionales, ya en la zona del litoral marroquí.
Su desaparición causó una profunda conmoción en El Puerto y en la provincia, donde era muy conocido y querido por su carácter cercano y su pasión por el cante flamenco. Su entorno más cercano ha agradecido las muestras de apoyo recibidas y ha pedido respeto en estos momentos de profundo dolor.
