El encuentro.
El concejal de Desarrollo Rural, Pesca y Mundo Marino, Javier Bello, se ha reunido esta semana con el nuevo delegado Territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía en Cádiz, David Gil, como primera toma de contacto entre ambos con el objetivo de sumar esfuerzos y recursos para potenciar el desarrollo rural, hacer más competitivo y sostenible el sector agroalimentario, el enoturismo o fomentar e incentivar el acceso de los jóvenes a la actividad agraria. Por supuesto, también hicieron hincapié en continuar empujando proyectos reales de futuro para el sector pesquero, como la apuesta por fusionar turismo y pesca, la acuicultura o la promoción del pescado de estero. Evaluaron igualmente la importancia de la lonja en la ciudad, siendo una de las más importantes de Andalucía.
Además, en el transcurso del encuentro hicieron balance de las distintas actuaciones que se están ejecutando gracia a las líneas de subvenciones del GDR Campiña de Jerez y Costa Noroeste de Cádiz, al que pertenece El Puerto, como por ejemplo el proyecto Puerta Verde de la Ruta Enoturística, que recupera un tramo de la Verada de Villarana, a su paso entre las lagunas Salada, Juncosa y Chica, y de una sección del Camino de Los Romanos desde este punto hasta la carretera Rota-Jerez, poniendo en valor una de nuestras zonas con un alto peso patrimonial, enológico y agropecuario. Actuación financiada en un 100% por los fondos ITI de Cádiz, procedentes del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) y gestionados por la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible a través del propio GDR.
Tanto Javier Bello como David Gil coincidieron también en señalar que el futuro del medio rural pasa por resolver el problema de la permanencia de la juventud en nuestros pueblos, haciendo posible el relevo generacional como garante de la continuidad de la agricultura que depende de la capacidad de renovación, la innovación y modernización del sector.
Ambos delegados han quedado en reunirse de forma regular para diseñar una hoja de ruta y línea conjunta de colaboración entre ambas administraciones para estudiar nuevos proyectos en el ámbito rural, en enclaves como la Sierra de San Cristóbal o el Poblado de Doña Blanca, y en el agrícola, en torno a todas las hectáreas de cultivo con que cuenta la ciudad.